El individuo tiene 32 años y ya contaba con otros 6 antecedentes penales. Ha sido imputado por violencia privada, ultraje público al pudor, receptación, violación de domicilio, lesiones personales y hurto. Varios de los antecedentes están vinculados a delitos en perjuicio de mujeres de distintas edades.

 

En horas de la mañana del sábado 15 de enero, se solicitó la presencia policial en calle Joaquín Suárez, en el barrio Rivera de la capital departamental, donde un conocido delincuente se estaba masturbando en la vía pública y delante de todo aquel que pasara por el lugar.

Cuando arribó la Policía, el denunciado ya se había retirado, aunque varios testigos coincidieron en identificarlo como Daniel Matías Tabeira González, de 32 años, sujeto poseedor de varios antecedentes penales, quien por otra parte se domicilia en esa misma zona.

Detenido en las cercanías y enterada la Fiscalía de 2° Turno, Tabeira González compareció en la sede Penal de 4° Turno, donde -a pesar de todos su antecedentes, algunos por hecho similares al de ahora-, fue condenado a solo 4 meses de prisión como autor de un delito de ultraje público al pudor.

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El último antecedente de este despreciable individuo data del 19 de noviembre de 2020 cuando fuera condenado a 13 meses de prisión como autor de un delito de hurto agravado, tras robarle a un trabajador -en pleno centro de Maldonado-, una serie de herramientas de mano.

La víctima estaba trabajando en calle Román Guerra cuando observó a un sujeto que se hizo de los efectos y se dio a la fuga. Posteriores recorridas de un móvil policial, permitieron ubicar a este conocido delincuente en calle Manuel Calleros, en la zona de barrio Rivera.

Detenido e identificado, llevaba consigo las herramientas robadas poco antes, por lo cual fue inmediatamente trasladado a dependencias policiales donde quedó a disposición Fiscal. Tras ser indagado, fue llevado ante la Justicia que nuevamente lo envió a prisión, por tercera vez en el mismo año.

Precisamente el 23 de junio de 2020, había sido enviado a la cárcel imputado por la autoría de un delito de hurto. Pero antes, el domingo 9 de febrero, a la altura de calles Joaquín Suárez y Leonardo Olivera, en el barrio Rivera de Maldonado, agredió físicamente a una nonagenaria.

La anciana dijo a la Policía que, Daniel Matías Tabeira González regularmente le pedía comida y dinero, y que en esa ocasión, como no pudo ayudarlo, la golpeó con un objeto contundente en la espalda. Viejo conocido de la Policía, fue detenido poco después en calle Alberto Caracara.

Llevado ante el Juez Penal de 4° Turno y a pesar de los antecedentes de todo tipo que ya tenía en su haber, incluso alguno parecido al hecho mencionado, fue condenado a solamente 3 meses de prisión efectiva como autor de un delito de lesiones personales intencionales.

Anteriormente, el 23 de septiembre de 2019, Tabeira González fue a la cárcel 4 meses, como autor de un delito de violación de domicilio, lo que quiere decir que, en caso de haber cumplido toda la pena por otro hecho anterior, hacía poco más de dos semanas que estaba en libertad.

La mañana del viernes 20 de septiembre, una mujer se presentó en la seccional policial 1ª para denunciar la situación que estaba viviendo su madre por las presiones que ejercía sobre ella un sujeto que en forma continua iba a su casa, en calle Joaquín Suárez, a pedirle dinero.

La denunciante aseguró que el sujeto era un conocido delincuente, quien además últimamente se había tornado tremendamente agresivo. Agregó que decidió realizar la denuncia porque en la última oportunidad que fue a la casa de su madre, Tabeira estaba en la cocina.

También es muy conocido por haber sido intervenido por la Policía en infinidad de oportunidades a lo largo de los últimos años, fundamentalmente por protagonizar actos violentos o reñidos con la moral en plena vía pública, acciones por las que también varias veces estuvo en prisión.

En múltiples ocasiones se apostaba en semáforos de distintos puntos de la ciudad de Maldonado a solicitar “unas monedas”. Pero si la respuesta era negativa y si quienes iban al volante eran mujeres, no dudaba en bajarse los pantalones y mostrar sus genitales e incluso masturbarse.

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