*) Fabián Manise

Si bien el duro invierno que nos azota hace que las actividades en la huerta y el jardín se ralenticen, no significa ello que no haya tareas para realizar. Aún tenemos posibilidades de sembrar hortalizas sobre todo si lo hacemos a resguardo del viento y de la lluvia o si se posee un invernadero. Acelga, lechuga, perejil, remolacha, achicoria, rúcula, zanahoria, escarola, arveja, puerro, albaca, tomate, berenjena, pimientos y habas, son las más adecuadas para la época.

Respecto a las habas, las podemos sembrar hasta finales del invierno para cosecharlas a mediados de primavera. Para obtener mayor cantidad de estas legumbres y que su germinación acontezca antes de lo previsto, los entendidos aconsejan ponerlas a remojo unas horas antes de sembrarlas.

También una buena opción, es cultivarlas entre plantas que se asocien, caso espinacas, lechugas, ajos, cebollas y puerros. Las habas necesitan recibir luz, poco riego y en cuanto a los nutrientes la planta no es muy exigente.

Otro de los trabajos a llevar a cabo, es plantar árboles frutales a raíz desnuda, es decir sin terrón, lo que permitirá el ahorro de dinero al adquirirlos. Los ejemplares indicados son: manzanos, perales, ciruelos, durazneros, damascos, membrillos, cerezos y kakis.

Si ya tenemos plantados de años anteriores, es oportuno realizar cortes en las ramas que les sean necesarios para conseguir un mejor desarrollo. Asimismo recuerda proteger los cultivos del frío y las heladas. Para las hortalizas se recomienda la utilización de mantas de plastillera, en tanto para los árboles y arbustos, se puede aplicar en la base del tronco, una buena capa de paja o malas hierbas secas y sin semillas.

También es importante este mes, el laboreo de la tierra en lo que refiere al aporte de materia orgánica. Si aplicamos estiércol o humus de lombriz, dejaremos el suelo preparado para las próximas plantaciones que recibirán los nutrientes necesarios para su perfecto desarrollo.

En otro orden, presta atención también que las hojas interiores de las plantas trepadoras de hoja perenne, reciban buena luz. Ten en cuenta también que el invierno es “campo fértil” para que caracoles y babosas realicen su labor en la huerta y el jardín. Son muy voraces en los cultivos de lechugas y coles, por lo que debemos eliminarlos, en lo posible utilizando productos ecológicos.

Si bien existen en el mercado infinidad de compuestos químicos, para evitar su eventual toxicidad se aconseja construir trampas que eliminen o alejen a éstos no deseables visitantes. Algo muy sencillo de preparar es triturar cascaras de huevo y mezclarlas con tres o cuatro dientes de ajo machacados en una taza de agua que tras dejar reposar unas horas, se podrá esparcir alrededor de donde suelen actuar. Asimismo se recomienda sembrar hierbas como menta, salvia, hinojo o cebolleta cuyos aromas suelen alejar dichas plagas y otras.

Aprovecha también la época para cambiar de maceta aquellos ejemplares que estén en recipientes que no se compadecen con el crecimiento de las mismas. En tales circunstancias podremos constatar que si las raíces se han desarrollado en exceso, no quedara otra solución que recurrir a una poda. Hay que sacar el cepellón de la maceta y con una tijera o incluso un cuchillo bien afilado se deberán efectuar los cortes que sobresalen del terrón en su parte inferior.

Acto seguido con un palo o un pequeño rastrillo hay que peinar las raíces del cepellón con el fin de desenredar las que se encuentren retorcidas y así expandirlas para que puedan crecer correctamente. A la maceta donde irá la planta, se le deberá agregar sustrato nuevo y entonces sí colocarla de manera tal que no quede ningún hueco sin rellenar. Finalmente regar generosamente el ejemplar y de ahí en más vigilar que tenga un crecimiento sin inconvenientes.

Y ya que nos referimos a riegos, es recomendable suspenderlo a plantas que están en el interior de la vivienda, hasta tanto comprobar que el sustrato esté seco. Muchas mueren en esta época del año por exceso de agua. En las que se encuentran en el exterior, procede a introducir dedos en el suelo o sustrato y si compruebas que no hay humedad, entonces sí regarlas. Amigos, con la intención que lo expuesto pueda contribuir a cuidar y mejorar vuestros cultivos, me despido hasta la próxima entrega, no sin antes recordarle que si tienen dudas o consultas que realizar, pueden hacerlo a través del Correo Electrónico Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla. que con gusto responderé.

 

*) Técnico en Jardinería y en Horticultura. Extensa trayectoria periodística en medios de comunicación de Uruguay (CX 16 Radio Carve y Nuevo Tiempo; diarios MundoColor, El País y Lea; VTV Noticias.

*) Ec. Pablo Broder

El país se enfrenta a un destino sin salida. Condenado a vegetar una y otra vez entre profundas crisis recurrentes y espaciados períodos en los que a mérito de alguna coyuntura exterior (el precio de los comodities de la primera década del actual siglo o el advenimiento de esporádicos gobiernos democráticos), permitieron ilusionarse con una perspectiva menos oscura.

A pesar de un comienzo relativamente auspicioso del aislamiento social, devino posteriormente la utilización de los típicos modos populistas, generando enemigos “del pueblo”, acusando entre otros a los que viajaron al exterior, a los capitalinos, a los runners, en lugar de haber probado estrategias segmentadas geográficamente y por grupos etarios, que hubiesen minimizado el impacto económico. Como también se insistió en la mirada unilateral sanitaria, sin considerar siquiera un enfoque multidisciplinario económico, psicológico y social.

Como consecuencia, la Argentina está en camino de sufrir una de las cuarentenas más duras y prolongadas del mundo, con el consiguiente costo humano y social, así como en términos de quiebras y la pérdida masiva de empleo. Se estima que más de cien mil comercios cerrarán sus puertas y el número de empresas concursadas tendrá cifras inéditas.

Una señal premonitoria, la retirada de la aerolínea Latam del mercado de cabotaje, a causa de la inflexibilidad gremial y el silencio cómplice del Gobierno.

Además, la fracasada intervención de Vicentin, con la intención de expropiarla, que degeneró en un papelón oficial usando slogans como “soberanía alimentaria”, “empresas testigo” o “empresas transnacionales”.

Otro dislate es el referido a la extenuante postergación de la reestructuración de la deuda externa, demora que ya está generando un costo sustancialmente superior al que habría sido de concordar de inicio con una postura menos arrogante.

El problema no reside sólo en la refinanciación de la deuda pública. Hay vencimientos próximos de una gran masa de bonos corporativos privados cuya refinanciación en caso de default entraña riesgo considerable.

La falta de acuerdo podría costar un descenso de hasta cinco puntos del producto bruto adicionales a los que ya caerá la actividad económica como consecuencia de la cuarentena y que podría  llevar a ser una de las economías con peor desempeño en el mundo en 2020-2021.

A la hora de buscar soluciones a la problemática que el país trae de arrastre y que se ha agravado por el efecto imprevisible de la pandemia, y a fin de cortar con la decadencia de los últimos 60 años, se torna imprescindible un plan estructural con base en un consenso social de largo plazo, con una sociedad comprometida a ceder privilegios sectoriales.

La única alternativa para posibilitar emerger del túnel del atraso, sería llegar a ser  un país creíble, donde uno de los pilares fundamentales de esa conversión resida en  la inversión, aquella que permita la generación genuina de trabajo, de factores multiplicadores del impulso inicial, y posibilite condiciones de productividad para competir con un mundo abierto.

Para ello, esa inversión nacional o externa, universalmente requiere tres condiciones básicas, que deben estar presentes concurrentemente:

– seguridad jurídica

– poder diseñar un horizonte de planeamiento de mediano y largo plazo, que incluya certezas lógicas sobre las políticas nacionales básicas, sean cambiarias, fiscales, laborales, etc.

– perspectivas ciertas de rentabilidad.

En el camino de poder concretarlas, el país debería previamente lograr consensos sobre las siguientes reformas:

– previsional

– laboral

– del Estado (equilibrio fiscal entre otras)

– judicial 

Si se repara en la historia de las últimas décadas de la Argentina, y en el momento actual, está la justificación del título de estas líneas: no serían imaginables, ni los consensos transformadores, ni esas reformas estructurales, ni por ende, la salida genuina de la problemática nacional.

Lamentablemente.

 

*) Es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, habiendo realizado cursos de especialización en Economía Moderna en la Universidad Federico Santa María (Valparaíso, Chile).

Fue profesor y miembro del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires; y profesor (en la carrera de postgrado) y director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad de la Cuenca del Plata, Corrientes. Argentina.

Presidió la Fundación de la Facultad de Ciencias Económicas, fue miembro del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, y Secretario General de la Sociedad Internacional para el Desarrollo en Argentina.

Fue Secretario de Programación Económica del “Gabinete de la Oposición” de la Unión Cívica Radical (Comité Nacional). Ha sido el introductor en la Argentina del programa Grameen, siendo a su vez presidente de la Fundación Grameen Argentina y representante honorario para la Argentina y el Paraguay del Profesor Muhammad Yunus, creador del Grameen Bank (el Banco de los Pobres) en el mundo.

Expositor en diversos congresos, nacionales e internacionales, columnista en medios gráficos, radiales y televisivos, es autor de numerosos artículos.

Sus libros: “Fundamentos de la Economía”; “Desarrollo y Estancamiento en el Proceso Económico Argentino”; “La Argentina y el Mundo”; “La convertibilidad en crisis”; “La Argentina de la posconvertibilidad”; “Dos años en la era K”; “Mitos y realidades en la era K” y “El ocaso de la era K”.

Desarrolla su actividad en el ámbito público y privado, como director y asesor de gobiernos locales, empresas e instituciones.

*) FAO

El estado de seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo advierte que la región no alcanzará el Objetivo de Desarrollo Sostenible 2: hambre cero. En 2019, 47,7 millones de personas sufrieron hambre.

*) Mag. José Luis Corbo

“La naturaleza de la acción corresponde a la naturaleza de la comprensión. Si la comprensión es crítica o preponderantemente crítica la acción también lo será. Si la comprensión es mágica, mágica también será la acción” (Paulo Freire)

Pensar en los significados de la emancipación humana hoy es, sin dudas, un gran desafío. Tal vez el primer y pequeño desafío al complejo camino a la emancipación es comprender su alcance en tanto texto y su dimensión práctica, dimensión práctica que la determina pero sobre la que vuelve para pensarse acción.

Lo cierto es que hablar de emancipación hoy nos acerca a la posibilidad real de pensar el ser social en un momento en el que los discursos que promueven las libertades individuales arremeten como plagas y se reproducen ante lo incuestionable del atractivo sonido de lo políticamente correcto.

Se me ocurre entonces, a la luz de un gran intelectual barbudo, retomar la génesis y las formas que, a mi entender, deberíamos rescatar como punto de partida para la construcción de un proyecto que hable de libertades colectivas. Elijo entonces, y como punto de partida, un texto que engarza la profundidad del discurso filosófico y la perspicacia estética que el discurso literario construye a partir de un decir que no dice, pero que construye a partir de un silencio que se significa en acción.

Dice Marx entonces… “los sentidos y el espíritu de los demás hombres se convierten en algo propio”. El punto de partida es el abandono del yo, de los deseos del yo y de lo que significa vivir a partir de un pensar que comienza en mí y que termina en mí mismo. Es el abandono definitivo del “ser en sí” en tanto génesis material de la conciencia cosificada.

Convertir en algo propio el espíritu de los demás hombres es la puerta de entrada a la dimensión humana, el camino del “ser para sí” y la forma más sagrada de un humanismo que se piensa en conjunto y que se sostiene a partir de la construcción conjunta de los ideales de justicia, una justicia que será de todos porque entre todos se construye.

Seguimos… “Por tanto, además de los órganos inmediatos, se forman órganos sociales…”. El texto nos enfrenta nuevamente a la posibilidad de ver más allá de lo inmediato y nos habilita a la desafiante comprensión de los significados que dibujan la ontología del ser social. Al mismo tiempo, la sensibilidad del discurso nos enfrenta a la inevitable liviandad de vivir en un mundo que construimos solamente a partir de lo que nuestros sentidos nos muestran, una sociedad en la que abandonamos las posibilidades de hurgar en aquello que ella misma nos esconde.

“Por ejemplo, la actividad en contacto inmediato con otros… se convierte en órgano inmediato, se convierte en órgano de una expresión vital y en un modo de expresión de la vida humana”. El mundo real es el mundo práctico y el ser de los sujetos es la resultante de un entramado de relaciones que no tienen valor en sí mismas sino que adquieren significación a partir de las redes dialécticas que configuran esa red que deviene en sociedad. El órgano social es la quintaesencia de la idea de emancipación.

Parece atractivo hablar de libertad porque la libertad vende los discursos a partir del hechizo de la palabra. El problema es que la libertad que los liberales nos venden no es más que una ilusión de autonomía individual que se enmascara en las formas de un libre albedrío que, en la medida en que se piense dentro de la trama -y no fuera de ella-, se desvanece bajo las formas represivas de relaciones políticas que nos construyen y de una clase que nos manipula a su antojo porque nos necesita no pensantes y así nos construyen.

La emancipación no entiende de libertades individuales, es el estado de libertad de los sujetos que se piensan en colectivo y que construyen en colectivo y para el colectivo. Es justamente la superación de las promesas de libertades individuales que no conocen de “órganos sociales”, la posibilidad de ver más allá de esa magia a la que refería Freire, una posibilidad que se nos ofrece a partir de prácticas educativas que definan proyectos sociales y que nos ayuden a pensarnos para los otros en un mundo que no construimos en solitario y que demanda transformaciones urgentes.

*) Licenciado en Educación Física. Magister en Didáctica de la Educación Superior. Posgrado en Didáctica de la Educación Superior. Actual Director Coordinador de Educación Física de CEIP Maldonado.

Integrante de la línea "La Educación Física y su Enseñanza" adscripta al grupo “Políticas Educativas y Formación Docente. Educación Física y Prácticas Educativas”.

*) Ec. Pablo Broder

La anunciada intervención y posterior expropiación de Vicentin, más allá del hecho puntual en sí mismo, adquiere el preocupante valor de una señal, por supuesto que confirmatoria, de lo que muchos habían supuesto, y también temido, sobre cuáles serían las políticas que habría de  adoptar este Gobierno. Entre otras peligrosas orientaciones, regenerar la estrategia estatizante de su más pura tradición. (Para preocupación de los memoriosos: ¿se querrá reflotar el IAPI, la Junta nacional de granos o intervenir en todo el comercio exterior como casi se está logrando con el cerrojo a las importaciones?).

La iniciativa permite una doble interpretación: por un lado la formal, respecto de la argumentación presidencial. Pero por otra parte, existe la posibilidad que esta medida se haya dispuesto -ante el fracaso oficial en el diseño de un plan concreto para encarar un doble frente (post cuarentena y deuda externa)-, como un mensaje fundamentalmente para los votos propios, con una reiteración de los principios tradicionales de su sector, con miras ya a las elecciones del 2021.

Los argumentos oficiales esgrimidos para la medida son, por lo menos discutibles. Ya con anterioridad, y apelando a un slogan sobre “soberanía”, se tomó el mismo camino con Aerolíneas, YPF, AYSA, CICCONE, Correo Argentino, entre otras, justificando las decisiones en preservar las soberanías energética, de vuelos aerocomerciales, de acuñar la propia moneda, etc.

En todos los casos, un rotundo y muy costoso fracaso.

Con Vicentin, el presidente apela a la preservación de la “soberanía alimentaria”, o de tener una “empresa testigo”, en un mercado donde el precio de sus productos está marcado día a día, internacionalmente, por la oferta y demanda global, sin entrar a considerar además, que la firma ocupa un rol menor  en el mercado local, al tomar solamente el 10% del comercio total.

Ante el argumento oficial: “… que sus trabajadores tengan la tranquilidad de continuar en sus trabajos.” Surge una inquietud adicional: dados los efectos de la cuarentena provocando la destrucción de un sinnúmero de empresas que genera la zozobra de decenas de miles de argentinos ante la posibilidad de perder su trabajo y su sustento, ¿se optará por similar criterio, de expropiar a todas?

Por otra parte, la afirmación presidencial es al menos controversial, pues la empresa se encontraba en conversaciones, en el marco de su concurso de acreedores, con varios grupos que podrían asumir su control y preservar en consecuencia la fuente de trabajo.

Además, atento a la conformación de los pasivos de Vicentin, al expropiar la empresa, el Estado asume también sus deudas millonarias hacia el sistema bancario y el fisco, por lo cual en esencia, lo que se está produciendo es una estatización de una obligación  privada, en el marco de un país exhausto en sus finanzas.

Ante los distintos dichos y hechos que surgen de la esfera gubernamental, se torna imperioso, en consecuencia, vislumbrar cuánto hay de falacias, medias  verdades, o simplemente relato.

El país, lamentablemente, se encuentra en una problemática circunstancia, y ante un futuro, al menos no prometedor.

*) Es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, habiendo realizado cursos de especialización en Economía Moderna en la Universidad Federico Santa María (Valparaíso, Chile).

Fue profesor y miembro del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires; y profesor (en la carrera de postgrado) y director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad de la Cuenca del Plata, Corrientes. Argentina.

Presidió la Fundación de la Facultad de Ciencias Económicas, fue miembro del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, y Secretario General de la Sociedad Internacional para el Desarrollo en Argentina.

Fue Secretario de Programación Económica del “Gabinete de la Oposición” de la Unión Cívica Radical (Comité Nacional). Ha sido el introductor en la Argentina del programa Grameen, siendo a su vez presidente de la Fundación Grameen Argentina y representante honorario para la Argentina y el Paraguay del Profesor Muhammad Yunus, creador del Grameen Bank (el Banco de los Pobres) en el mundo.

Expositor en diversos congresos, nacionales e internacionales, columnista en medios gráficos, radiales y televisivos, es autor de numerosos artículos.

Sus libros: “Fundamentos de la Economía”; “Desarrollo y Estancamiento en el Proceso Económico Argentino”; “La Argentina y el Mundo”; “La convertibilidad en crisis”; “La Argentina de la posconvertibilidad”; “Dos años en la era K”; “Mitos y realidades en la era K” y “El ocaso de la era K”.

Desarrolla su actividad en el ámbito público y privado, como director y asesor de gobiernos locales, empresas e instituciones.

*) Fabián Manise

Hola amigos no es novedad que el frío, acompañado de vientos y heladas, hacen que la época se vuelva poco propicia para realizar tareas en espacios destinados a florales. Pese a ello y comprendiendo que priman más los hábitos adquiridos por motivos que cada uno valora a su medida, no hay entonces otra alternativa que hacerle frente al clima.

Abrigados y tomando las precauciones sanitarias para prevenir el Covid-19 voy a recordar algunas tareas primarias que se pueden poner en práctica en el jardín. A fin de aprovechar al máximo los días con sol que se presenten, es oportuno limpiar las plantas trepadoras de hoja perenne para conseguir que la luz alcance al interior de su follaje.

También el momento es propicio para trasplantar aquellos ejemplares que están en macetas poco adecuadas para el volumen que han alcanzado y colocarlas en un recipiente más grande. En los canteros; azada o escardillo en mano, es hora de entrecavar la tierra para airearla y dar mayor calor a su interior y oxígeno a lo que se vaya a plantar.

Si bien cuando pensamos que flores podemos cultivar en esta época, lo primero que se nos viene a la mente son violas o pensamientos y caléndulas, está bien; pero de ellas ya hemos dado cuenta en anteriores notas. Hay otras especies quizás menos comunes como por ejemplo: la Cineraria, tiene una flor perenne de un color muy intenso, ideal para decorar y sobresalir entre los macizos de ejemplares en el jardín.

Esta planta pertenece a la familia de las Asteraceae y crece a una altura cercana a los 60 cmts. Debe plantarse en un lugar con sombra parcial y regarla con regularidad. El suelo debe ser rico en componentes orgánicos y es conveniente fertilizarlo antes de plantar, y contar con buen drenaje.

Otra de las especies de la presente estación es el Ciclamen; pertenece a la familia de las Primulaceae. Es muy comercializada por su esplendor decorativo y le proporciona al jardín un aspecto distinguido. Sus hojas de un verde intenso y las flores de un vivo color rojo o rosado contribuyen a ello. Puede ser utilizada en el exterior o en el interior de la casa, aunque en este último caso hay que vigilar que no pase calor ya que sino amarillean sus hojas y caen. Para cultivar la flor es necesario tener un suelo rico en materia orgánica siendo necesario el riego frecuente. Es propicio tenerla en un ambiente húmedo y con mucha luz.

En el mismo rubro se encuentra el Carraspique o Iberis; ejemplar que sobrevive a temperaturas muy bajas y se desarrolla bien hasta en las épocas más frías del año. A principios de la primavera los tallos y las hojas comienzan a reproducirse de forma muy rápida y puede alcanzar hasta 40 cm de altura. Tiene hojas largas y estrechas, sus flores son de color blanco, morado, rojo, rosa y violeta. Debe plantarse al aire libre con buena exposición al sol. El suelo para su cultivo deberá estar muy bien drenado, fertilizado y los riegos deben ser regulares, así la flor crecerá de forma sana.

Otra de las plantas a tener en cuenta son las comúnmente llamadas Margaritas (Bellis perennis) también de la familia de las Asteráceas, es una herbácea florífera perenne que necesita ser ubicada en un lugar bien soleado la mayor parte del día. El suelo debe ser rico, bien drenado y enriquecido con un buen aporte previo de materia orgánica.

También se puede recurrir a una planta que si bien se conoce poco, existe en los viveros y se la conoce por Heléboro (Helleborus) o rosa de Navidad. Pertenece a un género botánico que contiene más de 20 especies perennes y de hoja caduca. Se cultivan por su valor ornamental y también por dar una excelente flor de corte de larga duración. El hábito de poder florecer durante el invierno ya es suficiente motivo para ser un tipo de planta muy alabada y querida. Además, a esto se le suma la gran resistencia y capacidad adaptativa para muchos lugares y la belleza de los múltiples colores de los diferentes híbridos del género.

Si queremos disfrutar del Heléboro en el jardín, hay que saber que requieren de ciertos cuidados para mantenerse saludables a pesar de su gran resistencia. Lo primero y más importante, es alejar a los niños y animales de ellos, ya que si se ingieren sus flores pueden llegar a provocar intoxicaciones. Los lugares donde el clima es más frío es frecuente ver cómo los Heléboros continúan brotando.

Uno de los cuidados que se debe tener, es la ubicación en una zona con exposición a la sombra. El sol directo no es un buen aliado dado que puede dañar las flores. En cuanto a la humedad del ambiente debe ser bastante alta y un clima no cálido. De esta forma podrá mantenerse siempre fresco y con un buen aspecto para darle valor ornamental al jardín.

Lo aconsejable para el suelo, es que esté compuesto por tierra de jardín con 1/3 de turba y buen aporte de estiércol. Esto hará aumentar la cantidad de materia orgánica presente y podrá obtener los nutrientes necesarios para crecer bien. Si se ha elegido plantarlo en maceta y necesita un trasplante, lo mejor es hacerlo o bien en otoño sino a finales de invierno, garantizando ello que su supervivencia sea buena y no se dañe por las bajas temperaturas y el frío invernal.

Necesita ser abonado con estiércol al menos una vez al año y cada 15 días con un fertilizante mineral. Esto le ayudará a estimular la floración que al fin y al cabo, es lo que se quiere de esta planta. Se puede multiplicar a finales del invierno mediante la técnica de división de matas o a partir de semillas.

Amigos abrimos un paréntesis hasta la próxima entrega, no obstante, si tienen consultas, no duden en hacerlas llegar a través del Correo Electrónico: Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla. que con gusto responderé.

*) Técnico en Jardinería y en Horticultura. Extensa trayectoria periodística en medios de comunicación de Uruguay (CX 16 Radio Carve y Nuevo Tiempo; diarios MundoColor, El País y Lea; VTV Noticias.

*) Mag. José Luis Corbo

“La imagen prevaleciente que las escuelas, la industria del entretenimiento y las agencias gubernamentales han hecho pública es de beneficencia, en la que los intereses de las clases dominantes supuestamente representan los intereses de todos los grupos. Es una imagen en la que los valores y creencias de la clase dominante aparecen tan correctos que rechazarlos sería antinatural, una violación al sentido común” (Peter McLaren)

*) Ec. Pablo Broder

Al cabo de más de dos meses del llamado amablemente “distanciamiento social”, se está asistiendo, conjuntamente con un lento proceso de desacatamiento del riguroso encierro, a una eclosión de expresiones reclamando más apertura, que no son caprichosas, sino que responden a la imperiosa necesidad de medidas para evitar la destrucción de las economías, no solo globales, sino individuales, y que afecta en muchos casos a la propia supervivencia.

También a esta altura se presentan claras manifestaciones que afectan además de lo económico, al equilibrio emocional y psicológico de la población.

(Claro está que hay un sector de la población que no protesta: es aquel que depende en forma directa o indirecta de las arcas públicas, o aquellos que por la presión sindical no ven afectados sus ingresos a pesar de no trabajar -por ejemplo, empleados del Estado, docentes, judiciales-).

Por su parte, el derrumbe económico en la Argentina es enorme: en el primer trimestre la caída anualizada supera el 17%, deteriorando fundamentalmente a los sectores más vulnerables, a quienes se alega defender.

La cuarentena no solamente afecta a las finanzas familiares, sino a las  públicas. El descenso excepcional de la recaudación, que se compensa con una emisión monetaria sin precedentes, masa de dinero que se inyecta en la economía, explica la desconfianza en una inexistente moneda nacional y por ende la expectativa de una devaluación, que alimenta la brecha cambiaria entre el dólar oficial, y el llamado Blue.

Adicionalmente la Argentina se encuentra en un virtual default, que de no resolverse en las próximas semanas agravaría aún más el escenario económico. Sus consecuencias pueden ser gravísimas, no sólo porque el crédito al erario Nacional desaparezca, de hecho ya no existe, sino porque haría imposible la  financiación internacional al único motor potencial de una recuperación económica, que son las empresas privadas.

No queda claro, en este aspecto, cual es el beneficio de la estrategia del Gobierno quien a partir de una propuesta original planteada hace ya largo tiempo en condiciones de “Tomelo o déjelo” -notoriamente inaceptable por los acreedores-,   prolonga la concreción de un acuerdo que perjudica la posición argentina.

Esa actitud tiene similitud con el encare oficial respecto de la cuarentena; se partió de una rigidez que persiste con matices, fundamentalmente en el área del AMBA. El presidente Fernández sentenció al respecto “Va a durar lo que deba durar”.

En un sentido opuesto, en un reciente reportaje, el reconocido historiador Niall Ferguson, sintetizaba una opinión ampliamente compartida al respecto, tanto en el orden local como en el mundo: “Los cierres totales son una muy mala idea. Están destruyendo las economías. Y de todos los países, el que menos puede tolerar un crecimiento negativo es la Argentina Es una estrategia inviable y no están claros sus beneficios… la Argentina ahonda el pozo en que se encuentra”. (1)

Por supuesto que no se trata de preconizar el levantamiento irrestricto de las medidas sanitarias. Sería insensato hacerlo.

Pero sí se hace necesario atender las necesidades de vastos sectores de la población en los que el agobio del encierro prolongado, genera gravísimos costos no sólo económicos, también psicológicos y sociales, algunos casi terminales.

Urge tomar medidas, obviamente prudentes.

No obstante, tanto en el tratamiento de la pandemia, como en el caso del default, el gobierno ha optado por la misma estrategia dilatoria, como permaneciendo en una zona de confort.

Mientras tanto, el país en ambos casos, se encuentra en una grave situación.

*) Es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, habiendo realizado cursos de especialización en Economía Moderna en la Universidad Federico Santa María (Valparaíso, Chile).

Fue profesor y miembro del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires; y profesor (en la carrera de postgrado) y director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad de la Cuenca del Plata, Corrientes. Argentina.

Presidió la Fundación de la Facultad de Ciencias Económicas, fue miembro del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, y Secretario General de la Sociedad Internacional para el Desarrollo en Argentina.

Fue Secretario de Programación Económica del “Gabinete de la Oposición” de la Unión Cívica Radical (Comité Nacional). Ha sido el introductor en la Argentina del programa Grameen, siendo a su vez presidente de la Fundación Grameen Argentina y representante honorario para la Argentina y el Paraguay del Profesor Muhammad Yunus, creador del Grameen Bank (el Banco de los Pobres) en el mundo.

Expositor en diversos congresos, nacionales e internacionales, columnista en medios gráficos, radiales y televisivos, es autor de numerosos artículos.

Sus libros: “Fundamentos de la Economía”; “Desarrollo y Estancamiento en el Proceso Económico Argentino”; “La Argentina y el Mundo”; “La convertibilidad en crisis”; “La Argentina de la posconvertibilidad”; “Dos años en la era K”; “Mitos y realidades en la era K” y “El ocaso de la era K”.

Desarrolla su actividad en el ámbito público y privado, como director y asesor de gobiernos locales, empresas e instituciones.

OPS, UNICEF y FAO están realizando reuniones con representantes de los Poderes Ejecutivo y Legislativo con el propósito de informar los evidentes beneficios del etiquetado frontal para la salud y bienestar de los adultos y niños.

*) Ec. Pablo Broder 

“Va a durar lo que deba durar” señaló el presidente Fernández, quien insistió en que “el problema de la economía no es la cuarentena, sino la pandemia”. Casi simultáneamente el juez de la Corte Suprema Ricardo Lorenzetti opinó, que la cuarentena debe tener un límite temporal y que con las medidas para combatir la pandemia “los gobiernos no pueden avanzar sobre las libertades individuales”, enfatizando (sin hacer una expresa alusión al gobierno nacional) que “hay un riesgo de autoritarismo a nivel mundial si la emergencia se prolonga en el tiempo”.

Al cabo de más de dos meses, se está asistiendo, conjuntamente con un lento proceso de desacatamiento de la rigurosa cuarentena, a una eclosión de manifestaciones reclamando más apertura, que no son caprichosas, sino que responden a la imperiosa necesidad de medidas para evitar la destrucción de las economías, no solo globales, sino individuales, y que afecta en muchos casos a la propia supervivencia.

Claro está que hay un sector de la población que no protesta: es aquel que depende en forma directa o indirecta de las arcas públicas o de aquellos que por la presión sindical no ven afectados sus ingresos a pesar de no trabajar (por ejemplo, empleados del Estado, docentes, judiciales, etc.).

El derrumbe económico en la Argentina es enorme: en el primer trimestre la caída anualizada supera el 17%, deteriorando fundamentalmente a los sectores más vulnerables, a quienes se alega defender.

La cuarentena no solamente afecta a las finanzas familiares, sino a las públicas. La caída excepcional de la recaudación, que se compensa con una emisión monetaria sin precedentes, masa de dinero que se inyecta en la economía, explica la desconfianza en una inexistente moneda nacional y por ende la expectativa de una devaluación, que alimenta la brecha cambiaria entre el dólar oficial, y el único al que la mayoría puede acceder, el llamado Blue.

Adicionalmente la Argentina se encuentra en un virtual default, que de no resolverse en las próximas semanas agravaría aún más el escenario económico. Sus consecuencias pueden ser gravísimas, no sólo porque el crédito al erario Nacional desaparezca, de hecho ya no existe, sino porque haría imposible la financiación internacional al único motor potencial de una recuperación económica, que son las empresas privadas.

Es en este contexto que el presidente Fernández planteó que no planea convocar a economistas, relegando al anunciado en los albores de su gobierno, el Consejo Económico y Social.

Innegable es que hasta el presente, desde el punto de vista sanitario, la conducción del proceso de la pandemia ha obtenido resultados satisfactorios. No obstante, a esta altura de su desarrollo, y atento lo señalado anteriormente, se hace imprescindible atender a un triple vector: el sanitario obviamente, pero además el económico y también el psicológico, considerando el cansancio que la duración del encierro genera a la población. Ya no basta sólo con un comité de expertos en salud.

Este múltiple enfoque requiere un urgente abordaje, que excede a las posibilidades no sólo del presidente, sino de un unilateral grupo de expertos sanitaristas.

Frente a la enorme complicación que esta pandemia genera, sería arrogante afirmar que la solución a los problemas sea fácil y esté al alcance de la mano. Todo lo contrario.

Es por eso, que se requiere la concurrente opinión de expertos en las distintas áreas para ayudar a su formulación. No se está diciendo en estas líneas el QUE hacer, sino el COMO acercarnos a paliar los problemas y encarar la pospandemia.

Pensar que una persona o un reducido número de ellas atienda esa búsqueda, sería algo cercano a la soberbia.

 

*) Es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, habiendo realizado cursos de especialización en Economía Moderna en la Universidad Federico Santa María (Valparaíso, Chile).

Fue profesor y miembro del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires; y profesor (en la carrera de postgrado) y director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad de la Cuenca del Plata, Corrientes. Argentina.

Presidió la Fundación de la Facultad de Ciencias Económicas, fue miembro del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, y Secretario General de la Sociedad Internacional para el Desarrollo en Argentina.

Fue Secretario de Programación Económica del “Gabinete de la Oposición” de la Unión Cívica Radical (Comité Nacional). Ha sido el introductor en la Argentina del programa Grameen, siendo a su vez presidente de la Fundación Grameen Argentina y representante honorario para la Argentina y el Paraguay del Profesor Muhammad Yunus, creador del Grameen Bank (el Banco de los Pobres) en el mundo.

Expositor en diversos congresos, nacionales e internacionales, columnista en medios gráficos, radiales y televisivos, es autor de numerosos artículos.

Sus libros: “Fundamentos de la Economía”; “Desarrollo y Estancamiento en el Proceso Económico Argentino”; “La Argentina y el Mundo”; “La convertibilidad en crisis”; “La Argentina de la posconvertibilidad”; “Dos años en la era K”; “Mitos y realidades en la era K” y “El ocaso de la era K”.

Desarrolla su actividad en el ámbito público y privado, como director y asesor de gobiernos locales, empresas e instituciones.

*) Fabián Manise

Cuando ya estamos viviendo a pleno el tiempo en el cual el frío se siente con mayor intensidad y aparecen las temibles heladas, muchos de los que tienen una pequeña huerta en casa suelen pensar que ya sus tareas en ella están llegando a su fin.

Pero no es así, estamos en una estación especial para la recolección de frutas y hortalizas así como también para su almacenamiento y conservación, además de restaurar frutales y arbustos.

Algunas de las tareas que podemos hacer en nuestro huerto en otoño, consisten en su limpieza y organización para futuras temporadas, continuando asimismo con el laboreo de la tierra.

Recolectar los últimos coles, acelgas, puerros, espinacas, pimientos, zanahorias y papas como así también semillas de las plantas que más nos gustan, clasificarlas y guardarlas en un lugar seco y ventilado.

Por otra parte se impone proteger los cultivos invernales y de los pequeños invernaderos o cajoneras si vivimos en zonas de mucho frío. Continuar con la producción de compost con los restos de la poda, hojas, etc

Limpiar y mantener las herramientas, tanto las manuales como las eléctricas.

A la hora de efectuar nuestros cultivos otoñales para recolectar durante la temporada fría, debemos tener en cuenta la correcta protección del frío y buscar las variedades adecuadas para cultivar en esta época. Entre esas encontraremos: remolacha, brócoli, coles de Bruselas, col, zanahorias, coliflor, cebollas verdes, puerros, lechuga de hoja, (se pueden plantar en los invernáculos), guisantes, rábanos, colinabos, espinacas, nabos.

Hay que tener en cuenta que algunas de las variedades que hemos mencionado, aptas para los cultivos de otoño, pueden requerir de una recolección más temprana que otras. Un ejemplo de ello son las zanahorias y remolachas, las cuales conviene recolectarlas más pequeñas.

Plantación

Es tiempo también de plantar frutales con sus tutores y ataduras; en aquellos ejemplares viejos, limpiar sus troncos; máxime si tienen líquenes y musgos que puedan atraer parásitos, retirar aquellos frutos y ramas en mal estado.

Es una estupenda época para plantar árboles y arbustos, sobre todo a raíz desnuda que previamente hay que inspeccionar  y verifica si están sanas, turgentes, sin manchas ni olores a podrido, siendo conveniente  recortar las puntas y las magulladas. Plantar setos nuevos, sustituir los viejos y rellenar los huecos.

Florales

A raíz desnuda no hay impedimentos en plantar rosales, bulbos de floración primaveral en suelo drenado y rico, narcisos, tulipanes, crocus, jacintos y escillas.

Las nuevas plantas tienen que aclimatarse a su nueva situación por lo que se impone resguardarlas del frío con ayuda de protecciones plásticas, por ejemplo, las de origen tropical o subtropical. Las que van en macetas es aconsejable llevarlas a sitios resguardados o al interior.

Mientras mayor sea el frío acumulado en los próximos meses, mejores posibilidades para las flores y frutos que brotarán en primavera.

En materia de riego, las necesidades de agua son menores que meses atrás por lo que hay que espaciarlos.

Asimismo hay que reducir el riego de los cactus y plantas crasas hasta una vez al mes, y sólo durante las horas de mayor calor.

En las especies que viven en el interior, el agua que se les proporcione debe ser moderado, excepto las que están en crecimiento o en floración.

Un abonado orgánico general a base de estiércol, mantillo, compost, etc. debe hacerse cada año a finales de otoño o invierno. Evitar durante los meses fríos fertilizantes que contengan nitrógeno porque estimula el crecimiento y las plantas no lo necesitan debido a que están en reposo.

No olvidar abonar las macetas que aún tengan plantas con flor.

Hasta aquí algunos consejos a realizar en vuestra huerta y jardín que puedes realizar sin mayor esfuerzo y además será un buen ejercicio para paliar el frío ambiental.

*) Técnico en Jardinería y en Horticultura. Extensa trayectoria periodística en medios de comunicación de Uruguay (CX 16 Radio Carve y Nuevo Tiempo; diarios MundoColor, El País y Lea; VTV Noticias.

*) FAO

La iniciativa será implementada por la FAO en la cuenca costera más grande del mundo, de la Laguna Merín, de los Patos y Mangueira, para acompañar su desarrollo sostenible.

*) Ec. Pablo Broder

Este es, sin lugar a dudas, el peor momento del presidente Alberto Fernández desde que empezó la pandemia del coronavirus. Despidió de la Anses al responsable máximo del viernes negro, que expuso en la calle, y por impericia, a millones de personas de alto riesgo, apiñadas para cobrar infructuosamente su haber.

Previamente, una serie de episodios lo obligaron a un zigzagueo dialéctico tratando de enmendar situaciones conflictivas, algunas producto de sus propios desaciertos: desde el anuncio luego desmentido de las salidas recreativas en la cuarentena, los errores en materia de relaciones exteriores (enfrentamiento gratuito con Chile y con Suecia, amenaza de deserción del Mercosur, etc.), más la ausencia de mención alguna sobre estrategias para encarar la emergencia económica poscuarentena.

En este contexto, ha estallado con resonancia la espectacular suba de la cotización del dólar llamado “blue”.

Sería inútil buscar las respuestas a la estampida cambiaria buceando únicamente en aspectos monetarios o financieros, si no se considerara el marco general que la condiciona.

Además de la pandemia y de la economía nacional conmovida en sus cimientos, la Argentina se podría enfrentar, en primer lugar, a un nuevo default, que afectaría no solo las finanzas públicas, sino y fundamentalmente a las empresas privadas -factor clave a fin de comenzar a pavimentar la salida poscuarentena-, en el acceso a las líneas de crédito internacionales, perentorias para su devenir.

Asimismo, más allá de las muestras de civilizada convivencia exhibidas al inicio de la pandemia, desde el Gobierno comenzaron a exteriorizarse actitudes del Presidente, del gobernador bonaerense y de otros funcionarios oficiales, atacando directamente a miembros de la oposición o denunciando presiones, ya sean de políticos o periodísticas (¿desde cuándo opinar distinto significa presionar?), hasta la escandalosa actitud de la Oficina Anticorrupción, que abandonó su rol de querellante en causas donde se investigan supuestas maniobras de lavado de dinero de la familia Kirchner, que es interpretada como en sintonía con las intenciones de la vicepresidenta de obtener la rápida administración de sus bienes.

Esta abdicación constituye una continuidad en la acción emprendida ya con anterioridad por el Gobierno en materia judicial, que comenzó a agudizarse cuando el secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla, solicitó inconsultamente la prisión domiciliaria para el confeso Ricardo Jaime, o para Martín Báez, entre otros, hecho no desautorizado por el Presidente, quien a su vez pudo haber objetado la oleada de prisiones domiciliarias con algún repudio al beneficio otorgado al ex vicepresidente Boudou.

Esta nueva actitud del Poder Ejecutivo se desarrolla en el marco de una inactividad inquietante de la Justicia y también del Congreso que, en el caso de este último, gracias a la presión de la oposición, recién acaba de retomar su actividad.

A su vez, la sanción del DNU confiriendo poderes discrecionales para la reasignación de partidas constituye un alarmante avance del Poder Ejecutivo sobre el Congreso.

Es en este escenario que el billete verde, eterno refugio de sus ahorros para los argentinos, se dispara, impulsado fundamentalmente por la incertidumbre, no solo económica sino institucional, en un mercado de dimensión reducida, que lo expone a oscilaciones bruscas ante mínimos movimientos.

Adicionalmente, la increíble brecha entre la cotización oficial y el blue constituye un factor perverso que contribuye a lesionar aún más el saldo de la balanza comercial, al alentar sub y sobrefacturaciones en las exportaciones e importaciones, respectivamente.

La demora en corregir esta distorsión, ante el hipotético temor a una nueva repercusión inflacionaria, lesiona así, aún más, el magro acervo de divisas del Tesoro Nacional. Sería imprescindible una corrección.

*) Es Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, habiendo realizado cursos de especialización en Economía Moderna en la Universidad Federico Santa María (Valparaíso, Chile).

Fue profesor y miembro del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires; y profesor (en la carrera de postgrado) y director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad de la Cuenca del Plata, Corrientes. Argentina.

Presidió la Fundación de la Facultad de Ciencias Económicas, fue miembro del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Capital Federal, y Secretario General de la Sociedad Internacional para el Desarrollo en Argentina.

Fue Secretario de Programación Económica del “Gabinete de la Oposición” de la Unión Cívica Radical (Comité Nacional). Ha sido el introductor en la Argentina del programa Grameen, siendo a su vez presidente de la Fundación Grameen Argentina y representante honorario para la Argentina y el Paraguay del Profesor Muhammad Yunus, creador del Grameen Bank (el Banco de los Pobres) en el mundo.

Expositor en diversos congresos, nacionales e internacionales, columnista en medios gráficos, radiales y televisivos, es autor de numerosos artículos.

Sus libros: “Fundamentos de la Economía”; “Desarrollo y Estancamiento en el Proceso Económico Argentino”; “La Argentina y el Mundo”; “La convertibilidad en crisis”; “La Argentina de la posconvertibilidad”; “Dos años en la era K”; “Mitos y realidades en la era K” y “El ocaso de la era K”.

Desarrolla su actividad en el ámbito público y privado, como director y asesor de gobiernos locales, empresas e instituciones.

*) Mag. José Luis Corbo

“…es importante que los estudiantes afronten lo que la sociedad ha hecho de ellos, cómo se les ha incorporado ideológica y materialmente es sus reglas y lógicas, qué es lo que necesitan afirmar y rechazar de sus propias historias para comenzar el proceso de lucha por condiciones que les darán oportunidades para tener una existencia autodirigida” (Henry Giroux)

Tal como las condiciones histórico-materiales cambian, cambian las formas y los sentidos de la educación. Las instituciones educativas, aparatos de acción política con facultades para ejercer de mediadores sobre el poder latente del pueblo delgado en el estado, se someten a los giros que dicho estado realiza. Esos giros manifiestan ciertas intenciones a la vez que encubren otras, quedando bajo el agua ese iceberg enorme de intereses políticos que parece no ser necesario entender o que no hay necesidad de mostrar.

Con la intención de describir formas y sentidos educativos, se han elaborado estructuras teóricas de análisis, una suerte de constructos taxonómicos que categorizan y ponen nombres a la diversidad de prácticas educativas a las que la historia nos somete. Surgen así los modelos didácticos de la enseñanza, los paradigmas educativos o los intereses curriculares, ocupados de analizar los sentidos del curriculum oculto y las formas en que las prácticas se desarrollan a partir de dichos sentidos.

Está claro que los modelos teóricos que los análisis plantean no existen como tal, puros, sino que son aproximaciones teóricas para la comprensión de las prácticas.

En ese movimiento permanente que planteábamos, hay modelos que se muestran fuertes en determinados períodos pero que tienden a desaparecer en otros, y hay algunos que de a poco se apagan dado lo insostenible de sus intereses políticos y las lógicas que reproducen.

La disputa del campo, hoy, parece ser entre los modelos prácticos liberales y los modelos críticos emancipatorios. Intentaremos analizar los rasgos distintivos de ambos así como los intereses políticos que los sostienen.

Los modelos prácticos de la educación son los modelos liberales per se. Su discurso suena atractivo, ya que proponen la construcción colectiva del curriculum en la práctica a partir de los intereses y necesidades del colectivo social. Es decir que se realiza una lectura a la prescripción curricular y se somete a un análisis fenomenológico-hemenéutico, se lee el texto en su contexto.

De forma más sencilla: estos modelos buscan comprender el curriculum a partir de las necesidades que colectivamente se considere atender en función de las realidades locales. Lo que no se contempla en el modelo práctico, son las determinantes estructurales de los intereses y necesidades, es decir la forma en que la realidad material de los sujetos condiciona su forma de pensar, de sentir y de hacer. Mucho menos se contempla la posibilidad de que la escuela sea pensada como espacio de resistencia, lugar de respuesta en el que un colectivo disminuido en relación del resto, pueda comprender, enfrentar y transformar su realidad a partir de la apropiación de las herramientas cognitivas que le permitan enfrentarse con ella.

En definitiva, lo que terminan generando los modelos prácticos, no es otra cosa que la reproducción de la desigualdad a partir de la máxima de dar menos al que tiene menos y más al que tiene más. No es azaroso el auge de estas propuestas en países como Estados Unidos cuando educadores liberales planteaban que las escuelas de los barrios carenciados se encargaran de la formación de los llamados “ciudadanos de cuello azul”, futuros obreros asalariados.

En los modelos práctico-liberales, el saber que circula es el legitimado por la clase dominante, el que a su vez legitima la clase. Aquellos que Bourdieu llamaba “los herederos”, siempre corren adelante en la carrera liberal.

Esos modelos, que parecen venir con toda la fuerza –tal ha ocurrido en otros tiempos-, buscan desplazar cualquier resto de pedagogía crítica que vaya resistiendo los embates epocales.

Por otro lado, los modelos que nacen a partir de la teoría crítica y que configuran la pedagogía crítica, plantean ir en otra dirección. Estos modelos proponen la comprensión del mundo y de la realidad de la que cada sujeto es parte, así como de lo determinante de su condición material en sus estructuras de pensamiento. Lo interesante es que no proponen el movimiento unidireccional desde la estructura hacia el sujeto y, alejándose del estructuralismo ortodoxo y desesperante, plantean la condición de agente del sujeto y habilitan sus posibilidades de transformación del mundo material a partir de la comprensión crítica de las relaciones entre sujetos, de sus fondos políticos y de los intereses que las sostienen.

Los modelos críticos proponen un sujeto dotado de las herramientas políticas que le posibiliten transformar el mundo. Lo alejan de la reproducción no pensada, del determinismo aceptado como dogma y de la realidad apriorística que los liberales plantean. Le dan las herramientas al pobre de elaborar un juicio de valor para comprender su pobreza, y lo habilitan a transformarla a partir de la posibilidad de pensar en un proyecto social colectivo, un proyecto más justo socialmente donde el hijo del empleado de cuello azul nazca sin las ropas del padre que lo condenan al bajo salario. En fin, enseña a los estudiantes a comprender las injusticias del mundo dándole la posibilidad de elegir qué hacer y no de aceptar qué ser en función de los intereses del libre mercado.

 

*) Licenciado en Educación Física. Magister en Didáctica de la Educación Superior. Posgrado en Didáctica de la Educación Superior. Actual Director Coordinador de Educación Física de CEIP Maldonado.

Integrante de la línea "La Educación Física y su Enseñanza" adscripta al grupo “Políticas Educativas y Formación Docente. Educación Física y Prácticas Educativas”.

*) FAO

Estos valiosos no sólo son parte fundamental del medio ambiente, sino de las vidas de la personas que habitan los paisajes forestales: según el SOFO, 8 millones de personas que dependen de los bosques en América Latina son pobres, y representan aproximadamente el 82 por ciento de los pobres extremos rurales de la región.

El SOFO informa que África tuvo la mayor pérdida neta de área forestal en 2010–2020, con una pérdida de 3,94 millones de hectáreas por año, seguida de América del Sur, que perdió 2,6 millones de hectáreas por año. Sin embargo, desde 1990, las pérdidas de América del Sur han disminuido sustancialmente.

Si bien América Latina aún necesita reducir sus tasas de deforestación, el informe SOFO también destaca experiencias positivas en el uso y conservación sostenible de los bosques en varios países.

Castaña amazónica: piedra angular de la conservación del bosque amazónico

La castaña amazónica (la semilla del árbol de la selva tropical Bertholletia excelsa) es la única semilla comestible comercializada a nivel mundial que es cosecha de la naturaleza por recolectores forestales. En las últimas décadas, la cosecha de la castaña amazónica ha apoyado la “conservación mediante el uso” de millones de hectáreas de bosque amazónico por parte de decenas de miles de hogares rurales.

Estos frutos secos contribuyen significativamente a los medios de vida locales, las economías nacionales y el desarrollo forestal en una gran área geográfica, generando decenas de millones de dólares en valor de exportación anual en Bolivia, Brasil y Perú. Los usuarios de este recurso han desarrollado sistemas de manejos propios que sostienen la productividad.

Conectando ecosistemas para conservar la naturaleza y la cultura en el Caribe colombiano

Desde 2016, la Conexión BioCaribe ha estado trabajando para reducir la degradación y fragmentación de los valiosos ecosistemas en la región del Caribe del norte de Colombia.

Los resultados hasta ahora incluyen 13.500 hectáreas de nuevas áreas protegidas y otras 116.000 hectáreas en proceso de creación; 5.000 hectáreas cultivadas bajo modelos alternativos de producción sostenible, con más de 1.500 familias que han participado en escuelas de campo para agricultores; 1.300 hectáreas de zonas de amortiguamiento de áreas protegidas establecidas con planes de producción sostenibles; y 68.000 hectáreas de conservación y uso sostenible de los recursos naturales.

Guatemala: concesiones comunitarias en la Reserva de la Biosfera Maya

La Reserva de la Biósfera Maya fue creada en 1990 para proteger el área más grande de bosque tropical en América Central. Ocupa alrededor de 2,1 millones de hectáreas, incluidas 767.000 hectáreas bajo protección estricta, 848.400 hectáreas bajo uso múltiple (incluidas concesiones) y 497.500 hectáreas de propiedades privadas en la zona de amortiguamiento. Se han adjudicado alrededor de 533.000 hectáreas de concesiones en el área de usos múltiples, con objetivos explícitos de conservación.

Los resultados en términos de conservación de la biodiversidad en las concesiones incluyen niveles sostenibles de extracción de madera, control exitoso y menor incidencia de incendios forestales, mantenimiento de poblaciones de jaguares y deforestación de nivel bajo o igual a cero, lo que resultó en un aumento del 0.1 por ciento en la cubierta forestal entre 2016 y 2017.

Iniciativa de etiquetado apoya miel producida por mujeres bolivianas

La iniciativa Mountain Partnership Products (MPP) es un esquema de certificación y etiquetado que brinda apoyo técnico y financiero a los pequeños productores de montaña. Uno de los productos respaldados por dicha iniciativa es la miel de abejas de la especie Tetragonisca angustula, un producto forestal indígena cuidadosamente cosechado por una cooperativa de 160 mujeres de la comunidad guaraní en el Parque Nacional Serranía del Iñao, provincia del Chaco, Bolivia.

Las familias guaraníes han criado abejas desde la antigüedad. Sin embargo, la miel se ha convertido en un bien raro, ya que la deforestación y la introducción de abejas europeas más productivas ha reducido la distribución de las 350 especies de abejas sin aguijón conocidas. Perfectamente adaptadas al entorno local, las abejas sin aguijón son polinizadores cruciales; por lo tanto, esta iniciativa ayuda no solo a mantener los medios de vida de los apicultores y conservar las abejas, sino también a mantener la biodiversidad vegetal existente mediante la polinización.

*) La FAO es la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura y es la agencia especializada que lidera el esfuerzo internacional para poner fin al hambre. Su objetivo es lograr la seguridad alimentaria para todos y al mismo tiempo garantizar el acceso regular a alimentos suficientes y de buena calidad para llevar una vida activa y sana.

Con más de 194 Estados miembros, la FAO trabaja en más de 130 países. Todos podemos desempeñar un papel importante en la erradicación del hambre y la malnutrición.

En Uruguay, nos enfocamos en apoyar el cumplimiento del Derecho a la Alimentación Adecuada; avanzar hacia un sistema alimentario sostenible; acompañar la intensificación de la producción agropecuaria, reduciendo la brecha entre sectores urbano y rural y preservando los recursos naturales.

Por más información: http://www.fao.org/uruguay