Todo comenzó en avenida Luis Alberto de Herrera y culminó con una serie de allanamientos y otras detenciones en el barrio Nuevo Cantegril de Maldonado.

Poco antes de la hora 21.30 del domingo 4 de mayo, efectivos del GIR (Grupo de Intervención Rápida de la Policía), identificaron a una joven pareja que manipulaba una moto en avenida Luis Alberto de Herrera, en la ciudad de Maldonado. El chico fue identificado como J.G.G.M., de 22 años.

De la joven que lo acompañaba solo se informó que tenía 20 años, ya que tras la instancia indagatoria recuperó la libertad. Al ser revisado, en un bolsillo de su campera J.G.G.M. tenía un recipiente de plástico conteniendo marihuana, además de una bolsa de nylon con una sustancia blanca con clorhidrato de cocaína.

Aunque el joven forcejeó con los policías e intentó darse a la fuga, llegando incluso a provocarle algunas lesiones a un efectivo, fue reducido y luego trasladado a dependencias policiales junto a quien lo acompañaba. En tanto la droga, fue llevada a dependencias de la Brigada Departamental Antidrogas (BDA).

Allí se confirmó el tipo de drogas encontradas así como el peso: eran 10,5 gramos de clorhidrato de cocaína y 62,8 gramos de la misma droga pero en piedra, además de 6,6 gramos marihuana. Al margen de estas drogas, los policías habían incautado $ 830 y un teléfono celular.

La BDA se hizo cargo del procedimiento y dio cuenta de todas las actuaciones a la Fiscal de 4° turno, quien dispuso la puesta en libertad de la chica y la conducción de J.G.G.M. a su despacho para ser indagado. Continuando con las averiguaciones, la mañana del martes 6 del mes en curso hubo un allanamiento en el barrio Nuevo Cantegril.

En calle Antonio Cortez, donde se ubica un asentamiento irregular, la Policía allanó tres viviendas, en las que se incautaron un teléfono celular, dos handys, un morral conteniendo un recipiente con varias dosis de clorhidrato de cocaína y dinero, y se detuvo a A.A.M.P., de 24 años, y a un adolescente.

La Fiscal actuante dispuso que A.A.M.P. también permaneciera detenido, junto a J.G.G.M., en tanto el adolescente fuera entregado a Inau. Cumplida la audiencia judicial, en la sede Penal de 11° turno, A.A.M.P. fue condenado como autor de un delito continuado de suministro de estupefacientes, y penado con 2 años de penitenciaría.

En el caso de J.G.G.M., también fue condenado pero como autor penalmente responsable de un delito de receptación agravada, en régimen de reiteración real, con un delito continuado de suministro de sustancias estupefacientes, siendo penado con 2 años y medio de penitenciaría.