Con un acto muy reducido por la emergencia sanitaria, realizado este jueves en el cementerio de Maldonado, se recordaron los 23 años del fallecimiento del dos veces intendente departamental. En la necrópolis estuvieron el nieto de Burgueño, José Martín Hualde, el intendente Enrique Antía y el secretario de presidencia Álvaro Delgado.

Durante una ceremonia íntima realizada este jueves 14 de enero en la necrópolis de Maldonado, y sin presencia de público para respetar las medidas sanitarias, se recordaron los 23 años del fallecimiento del caudillo blanco local y dos veces intendente, Domingo Burgueño Miguel.

El actual jefe comunal, Enrique Antía, dijo que “todos los años los amigos de Burgueño se juntan para homenajear al viejo y recargar las pilas”. Agregó que se trata de “un momento de encuentro”, que, esta vez se debió realizar de otra forma para evitar aglomeraciones.

Sobre Burgueño expresó que “tenía una conexión especial con la comunidad”, y que, “nos dejó como legado, que es posible generar un desarrollo en equilibrio con la sociedad, un slogan de ´gente en obra´ que perdura en el tiempo”, transmitiendo un mensaje de “humildad y trabajo en equipo”.

Por su parte, Álvaro Delgado, resaltó que Burgueño “fue un gobernante departamental que se transformó en referencia nacional por un estilo de gobierno que combinaba buena gestión con lo popular”. Se lo puede definir como una persona “que le abría las puertas a todo el mundo”, dijo.

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