Un hombre y una mujer fueron enviados a la cárcel por el intento de robo de una serie de efectos y bebidas de la habitación de un conocido motel de Punta del Este en el que se habían alojado con una tercera persona. La mujer además, había sido autora de una rapiña en el barrio Kennedy.

El miércoles 2 de agosto, dos hombres y una mujer alquilaron habitación en un conocido motel de Camino Aparicio Saravia y avenida San Pablo, con la aparente intención de celebrar “una fiesta” en la mayor intimidad, aunque sus intenciones en realidad fueran otras.

Tras una permanencia prudencial dentro de la habitación, decidieron retirarse con la mayor discreción como ocurre en estos casos, pero algo llamó la atención del personal del establecimiento, porque los huéspedes estaban saliendo con más cosas de las que ingresaron.

Uno de los hombres, de 23 años, fue retenido por un guardia de seguridad que lo dejó encerrado en el garaje, pero la mujer y el otro hombre se fugaron por una puerta trasera. En forma inmediata se llamó a la Policía que en minutos estuvo en el lugar haciéndose cargo del joven detenido.

El trío, había intentado hurtar varios objetos de la habitación que habían alquilado, así como botellas de bebidas y un teléfono celular. Tras las primeras indagatorias, el detenido fue dejado en libertad pero en carácter de emplazado por la Justicia, en tanto se realizaron otras diligencias.

La mañana de éste miércoles, la pareja involucrada fue detenida por Investigadores del Distrito 2, y llevada ante la Jueza Penal de 4° Turno, que procesó con prisión a José Carlos Fernández Brites, por un delito de hurto especialmente agravado por la pluriparticipación en grado de tentativa.

Asimismo, envió a la cárcel a la mujer identificada como B.A.C.G., de 28 años, por la comisión de dos delitos de hurto especialmente agravados por la pluriparticipación, ya que durante los interrogatorios reveló que había sido autora de una rapiña en el barrio Kennedy el viernes 11 de agosto.

En el caso del motel fue imputada por hurto en grado de tentativa, y en el caso de la rapiña por hurto especialmente agravado por la penetración domiciliaria; ambos en reiteración real y uno de ellos en concurrencia fuera de la reiteración, con un delito de violencia privada.

B.A.C.G., el viernes 11 del presente mes atacó sorpresivamente a una mujer que se aprestaba a ingresar a su domicilio en el barrio Kennedy acompañada por sus hijos; la agredió físicamente y le arrebató varias bolsas de compras que llevaba consigo, un teléfono celular y otros efectos.

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